Desde que me rompieron el corazón soy más feliz
Feliz porque aprendí a quererme más, porque aprendí a ver por mí, porque ahora primero soy yo y luego yo.
Cuando alguien te traiciona, te decepciona, ves la vida de una manera diferente. Sabes que a pesar de haber llorado y de haber sufrido la vida te recompensará.
Y ahora no espero nada de nadie, no voy pidiendo, ni rogando, y mucho menos esperando algo que sé que no pueden dar. Ahora simplemente soy yo, y voy conociendo, voy viviendo y voy disfrutando cada momento de mi vida.
Sé que un día volveré a enamorarme y sé que ese día será mejor, pues sabemos que las relaciones malas nos sirven para darnos cuenta de qué es lo que queremos y qué no de una relación. Tengo expectativas altas porque sé que lo valgo, porque sé que merezco a una persona que dé todo por mí, en la misma medida que yo le corresponderé.
No guardo rencor y no voy por la vida recordando los momentos tristes, al contrario, voy aprendiendo de eso, voy tomando lo malo y convirtiéndolo en experiencia.
Desde que me decepcionaron, soy feliz, feliz porque me conocí mejor, porque ahora tengo la mejor relación que tendré en mi vida… conmigo misma.