EL PODER DE UN ABRAZO
Esa increíble sensación de abrazar a alguien especial para nosotros, esa sensación que no tiene comparación cuando abrazamos a nuestro ser amado, de ternura, de protección, de inmenso cariño, o esa sensación de fortaleza cuando algo va mal y alguien lo nota cuando de pronto sin pedirlo nos regala un abrazo.
Todos en algún momento hemos llegado a necesitar de un abrazo, ya sea de nuestros padres, nuestros amigos, nuestra pareja, y en ocasiones sólo queremos que alguien nos abrace, sólo necesitamos esa hermosa sensación de sentir que alguien está con nosotros.
Un abrazo llega a tener más sentido que mil palabras de fortaleza que podamos expresar hacia alguien que está pasando por un mal momento. Un abrazo llega a significar más que un montón de palabras bonitas que podamos expresar hacia nuestra pareja.
Hay abrazos dolorosos como los de despedida, cuando sabes que no vas a volver a ver a esa persona especial en un buen tiempo, o cuando estás terminando con esa persona que tanto amas y sabes que ese abrazo jamás se repetirá, son tan dolorosos que sientes que dejas una parte de ti en ese instante, no obstante, sabes que si no lo abrazaras por última vez lo extrañarías aún más, así que aunque dolorosos en ocasiones son necesarios.
De igual manera existen abrazos tan afectivos como los de una reconciliación, en donde no te quieres separar jamás de esa persona y qué decir de ese abrazo que entregas a una persona que has extrañado tanto, en los que en ocasiones las lágrimas salen solas de tanta emoción que nos causa.
Cuantos de nosotros no hemos sentido que nuestro mundo se derrumba y aunque tengamos a personas dándonos palabras de aliento y de fortaleza para seguir, sentimos que no sirven de nada, nuestro problema es tan grande que parece que nunca terminará pero al llegar esa persona tan especial y obsequiarnos un abrazo, sentimos que aquello que está roto en nuestro interior se va construyendo nuevamente, sentimos cómo de pronto todo toma un mejor aspecto y cómo verdaderamente existe una forma positiva de enfrentar ese problema que parecía eterno.
Para muchos de nosotros un abrazo sincero de nuestro ser querido vale más que un montón de besos, esa increíble sensación de guardar el aroma de quien te abrazó, el aroma se queda impregnado en la ropa o en la piel y así podrás recordarlo por lo que resta del día. Dirán que soy un poco cursi, pero si te ha pasado, entenderás que es una sensación inigualable.
Regala abrazos a tus seres queridos, así sin más, sin motivos, sin razón aparente alguna, nunca sabes quién esté pasando por algún momento difícil y ha estado esperando con ansias ese abrazo, nunca sabes quién ha estado estancado en una difícil circunstancia y sólo necesita de ese abrazo para seguir adelante. Estoy seguro que un día necesitaste uno, entonces por qué no simplemente seguir con la cadena de abrazos que hará sentir mejor a alguien más y por supuesto te hará sentir mejor a ti también.