Esto es para ti mamá…
Quisiera escribirte la carta más bonita que nunca antes hayas leído, las palabras más bonitas que jamás hayas imaginado y a través de mis letras hacerte sentir lo que nunca has sentido. Sin embargo, creo que nunca encontraré la forma ni las palabras exactas, sí es que existen (pues todas no serían suficientes) para describir lo que significas para mí; en mi vida y además lo que me haces sentir. Me duele e inquieta no poder ser muy expresiva o cariñosa como desearía serlo, a menudo bastante trabajo me cuesta, pero mi amor por ti no se delimita de ninguna manera; y muy a mi estilo sé que no cabe la menor duda que tú eres mi todo y que por ti daría la vida, quizá para el mundo solo seas una mamá mas, pero para mí, tú eres mi mundo.
Primeramente quiero agradecer a Dios por seguirme dando la dicha y el privilegio de tenerte a mi lado, y a ti mamá, gracias por darme la vida, por compartir todas mis alegrías y ayudarme en mis tristezas, porque con tus miradas y silencios tú me dices todo, y aún así me das tu apoyo. ¡Por ser mi mayor orgullo, inspiración y fortaleza! ¿cómo no serlo? sí eres una reina incomparable, guerrera valiente e indomable, luchadora invencible, una aliada constante y amiga fiel. Tú has sido el mejor regalo en mi vida, eres mi mas grande tesoro, mi ejemplo, mi guía y mi todo; gracias porque todo lo que soy y lo que espero un día ser, te lo debo a ti mamá.
Nací contigo; a través de ti, por favor no me pidas nunca que un día aprenda a vivir sin ti; sin tu presencia, sin tu sonrisa, tus abrazos , tus besos, tus palabras y tu voz…Soy tan afortunada de poder formar parte de tu ser, de tu vida, y aunque sea por este medio, quiero que todo el mundo se entere que es un honor amarte madre mía; nunca lo olvides, en esta y hasta en otra vida siempre lo haré, así como diré que mejor mamá para mí no puede haber.
Tus brazos son el mas tierno y comprensivo refugio para sentirme protegida, tus palabras me dan seguridad, y tus manos al recorrer mi cabello hacen que sienta paz… Sé que tu labor de madre, esposa, hija y mujer no ha sido nada fácil pero es la mejor; no contemplas lo imposible, es incansable e inigualable y además lo haces con amor, gracias por amarme incondicionalmente y sin juzgar, por confiar en mí y hacerme soñar, recuerda: «¡siempre juntas, siempre unidas y siempre fuertes!» sólo quisiera me prometieras que estarás conmigo el resto de mi vida, y no de tu vida.