Ella era complicada, aparentaba ser una mujer fuerte, sin emb..." /> Incondicional forma de amar – El Perla Negra

Síguenos en Facebook:


Historias

Publicado en octubre 27th, 2015 | by Tere Martinez

1

Incondicional forma de amar


Ella era complicada, aparentaba ser una mujer fuerte, sin embargo en el fondo era insegura, conseguía lo que quería le costara lo que le costara, construía barreras para que nadie conociera sus miedos e inseguridades, odiaba que la gente la viera vulnerable; no era para menos siempre fue desafortunada en el amor, en realidad no figuraba en su lista de prioridades, su única prioridad era su vida profesional.

Cuentas Netflix

Él era ambicioso se complacía con lujos caros, sociable e interesante, tenía buen tema de conversación; no era para menos, le gustaba viajar, amaba la música y las artes. Simplemente una persona muy culta, típico soltero con el que toda mujer deseaba casarse, su defecto es que tenía muchos demonios, había salido de una relación tormentosa donde hay infidelidad, él solo había soñado casarse con una mujer.

Ella lo conoció de una forma poco común, como comienzan las mejores historias, sin planearlo, él nunca le dio mucha importancia al conocerla; tenían muchas cosas que los unía, los mismos gustos musicales, les gustaba bailar y eran muy sociables; en ese momento se encontraban algo rotos y eso era lo que los conectaba, desde ese primer instante se engancharon uno al otro, disfrutaban platicar y decir quién era el menos afortunado en el amor.

Ella sólo pensaba en la forma de sanarle el corazón, buscaba hacerlo reír y que olvidara sus demonios; lo escuchaba y lo veía llorar, comprendía sus miedos e inseguridades. Él intentaba reírse, aunque fuera de una forma forzada, sus pensamientos estaban en otro lugar, era algo distante.

166582_si-alguien-es-lo-suficientemente-estupido-para-alejarse-de-ti

Ella por las noches sólo buscaba alguna forma de que le hiciera mimos, sus besos y un poco de caricias, no sabía por qué a su lado se sentía segura, la hacía sentir tranquila el sólo hecho de dormir en su pecho y escuchar su corazón latir, pensaba que algún día sería suyo y de nadie más. A él le fascinaba verla desnuda, acariciar su piel, le complacería en lo que fuera hasta en sus más oscuras fantasías, trataba de decirle palabras bonitas para hacerla sentir especial, -siempre estaremos juntos- le susurraba.

Ella se quedaba dormida soñando en un futuro juntos, sentía que cada día lo tenía más cerca; él buscaba un pretexto para llamar a su ex, sin que se diera cuenta, marcaba en las madrugadas y otro hombre contestaba la llamada, simplemente era feliz a lado de otra persona.

Ella le preguntaba muchas veces: –¿Qué somos? -no estoy listo aún– él le contestaba. En el fondo jamás amaría a alguien igual, no después de pensar en casarse con otra mujer. Buscaba no darle tanta importancia a sus palabras, sólo le contestaba: «No importa, llegará el día que estés preparado».

Ella conocía a otras personas que le ofrecían lo que él no, un amor incondicional, sin drama, sólo que disfrutaba ese drama que los unía; él conocía otras personas, las ilusionaba, las usaba y no volvía a saber de ninguna; en el fondo percibía que no era la única, no obstante amaba su libertad y pensaba que siempre volvería.

sad_girl_2-wallpaper-1920x1080

Un día él conoció a alguien especial, sin planearlo como suceden las mejores historias, le gustaba verla reír y disfrutaba sus largas pláticas, en ese momento se dio cuenta, alguien más lo había curado y estaba listo para enamorarse. Nunca supo cómo manejar la situación, pensaba la forma de decirle y que no fuera tan doloroso, lo amaba, le destrozaría el corazón, sabía todos sus miedos e inseguridades, no podía hacerla llorar, no a la persona que le había regalado sus mejores sonrisas, conocía lo que le había costado abrir su corazón y ser cursi como con ningún hombre.

Ella cantaba cuando sabía que lo vería, ese día no le salía la voz, sentía en el pecho una opresión, no podía ni arreglarse, tantas veces planeaba verse linda; ese «tenemos que hablar», intuía que no era buena señal. Él no quería llegar ese día al lugar pactado, “ya no podemos vernos, conocí a una persona y pretendo tener una relación formal”; esas palabras retumbaban en su cabeza, tal vez ya percibía que llegaría este momento, lo conocía tanto que lo supo en el momento que ya no contestaba los mensajes, que la evadía, cuando cancelaba sus planes, Él pensaba que se alejaría por su bien, por amor propio, ella sólo quería que estuvieran juntos, no le importaba cuántos días tuviera que esperarlo. -Todo está dicho, yo sólo quiero que tú seas feliz- sólo le pudo contestar eso.

Ella aún le pregunta con lágrimas en los: ojos ¿Por qué si te sané el corazón no me pudiste amar?. Él aún no tiene la respuesta. Odia verla llorar, pero sabe que merece a alguien más…

Que la ame como ella sabe amar, de esa forma incondicional.


 

Cuentas Netflix


Publicado por



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir ↑