Para quienes siguen a los héroes, mentores y líderes
La humanidad sin duda es una gran colección de diversidad, en cualquier aspecto que se le desee mirar, sin duda es imposible o al menos una tarea titánica, encontrar rasgos similares entre cada individuo. Pero hay algo que sí habita en cada uno de nosotros, innegablemente tenemos un hábito que nos ha precedido desde el inicio de los tiempos, sin importar cuáles sean nuestras creencias, de que cómo ha surgido el universo o cómo afrontamos el mañana; tenemos una necesidad de hallar un punto guía, un diferenciador, un individuo que nos muestre el norte, esos individuos que parecen de otro mundo.
No hablemos de ningún aspecto, no es algo necesario, el punto es que al final estamos destinos a buscar un líder, un héroe, un mentor, alguien que esté dispuesto a ir adelante, forjando el nuevo camino, pero eso surge del miedo y el hábito de creer en los más fuertes.
Nosotros los humanos, somos seres llenos de miedos y necesidades, eso nos evoca a buscar a quienes en sus luchas nos muestren la libertad y valor que deseamos el camino, que a nuestra consideración, al verles será el correcto. Pero sin duda es un vicio, no negaré que cada uno tiene su héroe, líder o mentor, incluso al escribir esto, por mi mente me alcanzan un par de personajes que veo de esa forma; esos individuos se muestran diferentes, no por su diversidad sino por su sobresalientes luchas, pensamientos o caminos.
Pero no vinimos a este mundo seguir héroes o cualquiera similar, la verdad vinimos a ser los lideres, héroes, guerreros y cualquier otro calificativo de ese tipoen nuestras vidas; sin imponer a otros héroes en nuestras batallas. Como un dijo alguna vez el rey del blues B.B King, recientemente fallecido: “todos tenemos héroes, pero trata de ser tú mismo siempre”; en mi opinión, los héroes son una guía pero nada más. Vive y lucha tu vida, sé héroe y protagonista de tus glorias, vive tu propia aventura… Después de todo, los héroes, mentores y líderes, también han caído, fallado e incluso, se han perdido en el más distante despeñadero. Nadie es invulnerable en este mundo de sueños errantes.