Vete de una buena vez…
En este mismo momento me gustaría gritar, realmente hacerlo sin importar si a alguien le molesta o no. Y si les molestara lo seguiría haciendo, pues también lo disfrutaría. Me cansa que todos traten de callarme cuando quiero ser franca, para no lastimar. Yo debo cuidarme de no hacerlo y quién le dirá a ellos que no lo hagan conmigo. Falsos porque lo que en verdad les importa, es que les mienta en la cara. Que me trague la verdad para que no lloren al escucharla.
He escuchado muchas veces a mi oído que soy una buena persona, que valgo mucho. Sí, lo soy, también valgo (y mucho). Pero también soy la peor persona cuando me molestan. Puedo cerrar todo lo bueno de mí, para hacerte ver y sentir como me lastimas tú a mí. Entonces es cuando pides mi comprensión. Y a veces me siento tan cansada de ti, que prefiero seguir lastimándote.
Me preguntas porqué me duele, porqué no estoy feliz. Me pides que lo diga, para después pedirme mi silencio. Eso es falso. Deberías sólo irte de una buena vez. Así no tendrías que fingir que te importa. Prefieres protegerte a ti mismo, de eso que no quieres ver. Y pensar que antes te deseaba para todo.
Ahora ante tanto dolor y cicatrices que nunca quisiste infligirme con intención. Te sorprendes del dónde, del cómo y cuándo todo cambio. Pero has estado tan ciego y egoísta que preferiste cuidarte a ti mismo y a tus ideas. Sin querer cambiar algo para no quitarte la comodidad. Pues quédate con todo, revuélcate en el mismo mundo vacío banal en el que vives.
Sólo espero que no sufras más, eres tan bueno haciendo mil cosas para no pensar, que sé que un día te llegará de golpe todo. Pero yo ya no estaré ahí para ti. Para mi mala suerte y buena para ti, yo te quiero mucho. Te diría la palabra que se sigue de querer, ja ja; pero no mereces que la escriba. Voy a llorar, me voy a quebrar, perderé algo de mi alma otra vez, me voy a querer morir; sí, suena idiota y más porque será por ti.
Y sí, quiero romperme para después volverme armar, lo haré. Tú sé fuerte, disimula, calla lo que sientes, sé positivo y guárdalo todo donde más te acomode. Quiero explotar de dolor, como un día lo hice de amor por ti. Para ahora sí, de una vez por todas, aprender esta lección. Y no dar todo a cambio de nada.
Aunque te vas, sé que me dolerá verte salir y divertirte. Yo, no haré lo mismo. Quiero sentir la soledad, tanto que la próxima vez que abra mi corazón y también abra mis ojos, vea la realidad y no una ilusión.
Ahora sólo te pido, que no vuelvas más, nunca más por favor.